Nuestra primera sesión de las BLANCAS MARIPOSAS, dentro del ciclo, SOY MUJER DE LA TERCERA EDAD Y… ¡ESTOY MÁS VIVA QUE NUNCA!, dentro de “Los Jueves de Conciencia Bibliotecaria”, llevada el 1º de junio del año en curso, en punto de las 17:00 horas, reunió a una treintena de asistentes con el fin de escuchar sus experiencias y trayectorias de vida, con el propósito de que niños y jóvenes escuchen a los adultos mayores y puedan encontrar ejemplos de sobrevivencia, que les apoyen en su desenvolvimiento personal y social, ya que hemos perdido la capacidad de oír no sólo con los oídos, sino con la voluntad, con la empatía, con las ganas de aprender, en este caso, de aquellas mujeres que tuvieron que luchar en un tiempo y condiciones diferentes a las nuestras.

Hubo un tiempo en que se nos enseñaba a escuchar a las personas a las que llamábamos, a veces, de manera ríspida, ancianas y ancianos, y aprendíamos de sus consejos, de los retos que habían superado, de sus sueños e ideales por sobresalir en un contexto que siempre ha sido competitivo y doloroso, las más de las veces, lo que no quita las alegrías que los instantes nos obsequian.

Nuestras invitadas estuvieron maravillosas, pues no les causó pánico escénico el compartir con el respetable sus experiencias, sino que por el contrario, nos dejaron observar sus sentimientos y valor para superar los acontecimientos que las llevan ahora a tener buen sentido del humor y una gratitud hacia la vida.

Lo hicieron muy bien y espléndidamente y nos hicieron sentir que no hay que rendirse, hay que luchar por la fortuna que tenemos de haber nacido y estar vivos, pese a todos los pros y contras que significa estar en y con la sociedad en un mundo lleno de magia.