top of page

 

¿A QUÉ TE SABE EL 2015?

A todas las posibilidades, a lo más probable, al azar, a la suerte, a los acasos, a los quizás por esos pasos y por esos rumbos donde nada es seguro y todo tenemos… Tal vez nos sepa a que logramos llegar en edad adonde nunca nos imaginamos, a que hemos vivido más allá de todos los sueños peregrinos o inmóviles, y a las realidades imaginarias, o a que nos hemos quedado sujetos en el mismo sitio al lado de la cotidiana sensación de ser árboles, piedras, raíces, o a que tal vez hemos volado con gaviotas, golondrinas, pájaros que saben encantar a los peatones con sinfonías mañaneras, en esas familias que se llaman alamedas, bosques…

A qué nos puede llegar a saber este año que inicia y que ya se asoma entre nuestros tiempos con todas sus distancias, tal vez a piel recién estrenada o  entre arrugas, huesos cascareados por los tantos trotes o huesitos con aroma recién nacida que servirán para llenar con pasos viejos y pasos nuevos, los caminos que nos traerán estas peregrinaciones.

A qué nos sabe este año, acaso a que hemos cumplido, a que tenemos palabras que decirles a la vida y a la muerte, a que tenemos horarios fuera de los horarios para vivirnos con toda la libertad posible, o tal vez nos sepa y nos sabe a que ahora sabemos que no sabemos nada, y que hay mucho que aprender y frutos que cortarle a la luz y a las sombras, a las noches y a los días, a las semanas y a los meses que forman estructuras como telarañas en el pensamiento y en las emociones, ahí donde coagulan los anhelos y amanecen dimensionados por el arte y por la inteligencia.

¿A qué le sabe a usted el año nuevo? ¿A qué me sabe? A mí me sabe a todas las oportunidades de servirlo en esta institución educativa y cultural que se llama biblioteca, y que está al servicio de todos aquellos que busquen conocimientos, verdades y hasta insospechadas mentiras, pero necesarias para que se asome el sol después de ciertas oscuridades.

Así sea en mucho este año. Así sea de piadoso con todos nosotros y con las sorpresas que trae en sus cajitas transparentes, pero que sólo podemos asomarnos al interior desde la luz propia de nuestras voluntades, porque no tenemos otras formas de levantarnos que la voluntad, esa energía poderosa y combativa que lo puede todo, siempre y cuando tengamos la consciencia de despertar.

Esperemos que este año nos sepa a que no estaremos dormidos… ¡FELIZ AÑO!  

HÉCTOR ESQUER

EDITOR: MARIO O. DÌAZ DE LEÒN JASSO

TEXTOS:HÈCTOR ESQUER QUIÑONEZ

bottom of page